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TRICIA BARRERA
DOLOR SE VE REFLEJADO EN JUANA LÓPEZ QUIEN ERA LA PAREJA DE ESLAVIO PÉREZ.
Murió sin alcanzar el sueño americano

JULIO MARTÍNEZ RIVERA

Eslavio Pérez perdió la vida al ser abandonado por los polleros cerca de Falfurrias

puebla — El drama de cientos de mexicanos que buscan llegar a Estados Unidos y que en muchos casos pierden la vida en el intento cobró otra víctima.

Eslavio Pérez Almaraz, oriundo de Puebla, perdió la vida el 22 de febrero al este de Falfurrias, Texas, después que los coyotes que había contratado con su acompañante los abandonaron.

El joven de 24 años y Juana López, de 25, habían partido el 21 de febrero desde Xonacatepec, Puebla, tras pagar cada uno $1,400 a los coyotes para que los ayudaran a llegar a Estados Unidos.

Al morir Eslavio, Juana recibió ayuda del Consulado de México en McAllen para salir de Estados Unidos y llevar el cuerpo de su compañero de regreso a México.

El 26 de febrero realizaron los funerales de Eslavio en Pahuatlán, lugar donde nació, mientras que Juana está en Xonacatepec en medio de una crisis nerviosa.

No era la primera vez que Eslavio y Juana cruzaban la frontera norte en busca del sueño americano. Esta pareja permaneció durante cinco años en Estados Unidos: él era albañil y ella trabajaba en un restaurante.

Sin embargo, regresaron a México sin que hasta ahora se conozca la razón de esta decisión.

Unas semanas después empezarían otra odisea para viajar nuevamente a Estados Unidos, pero esta vez terminaría en tragedia.

Pobladores de Xonacatepec, revelaron que en su localidad no existen polleros, sino que son contactados en la frontera norte donde cobran entre $1,400 y $1,600 por persona.

El drama de Xonacatepec

En este poblado abundan los niños y el hambre. Hace 20 años era normal que una pareja tuviera hasta 18 hijos. Ahora los matrimonios sólo tienen entre 5 y 6.

La viuda de Eslavio Pérez Almaraz proviene de un hogar de 12 hijos.

La gente no emigra de este pueblo por gusto, sino por necesidad, por hambre, dicen algunos habitantes.

En las escasas maquiladoras que quedan en Xonacatepec a las mujeres les pagan $53 a la semana por laborar de las 6 am hasta las 3 pm.

Aun así, un anciano dijo: "Es más fácil que las mujeres consigan empleo, que nosotros los hombres".

Y es que en este pueblo, según confirmaron varios ciudadanos, la gran mayoría de los hombres se dedica a la albañilería.

Los jovencitos trabajan como ayudantes de albañil desde los 13 años y ganan $61 a la semana, en tanto que los albañiles expertos reciben un máximo de $106 por siete días de trabajo.

Los hombres que escapan de ser albañiles son muy pocos, y son los que aceptan ser contratados como obreros en las 10 empresas textileras ubicadas en la zona. En esas fábricas el trabajador gana unos $5 por día.

Uno de los familiares de la viuda explicó que en Xonacatepec tanto los hombres como las mujeres tienen que trabajar para dar de comer a los hijos: ellas se van de obreras a las maquiladoras y ellos de albañiles. Y eso a pesar de que gran parte de los terrenos en esta región son agrícolas.

Aquí las penas se ahogan con aguardiente porque en Xonacatepec no existe dinero ni siquiera para beber cerveza.

Entonces los albañiles se reúnen por las noches para echarse cada uno al menos un cuarto de litro de aguardiente cuyo costo es 18 centavos de dólar.

De trago en trago dejan volar su imaginación y hablan de sus sueños y de la posibilidad de intentar llegar a Estados Unidos.

Muchos, quizás, no contemplan la muerte, algo tan real como lo ocurrido a Eslavio Pérez.

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