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GIOVANNI OVALLE |
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LA PARRILLADA ARGENTINA: UNA MINIPARRILLA EN SU MESA. |
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Tango de buena carne
GIOVANNI OVALLE
El Buen Bife es un restaurante donde se reinventa el concepto del buen comer
Los aromas, sabores y colores del lugar se entremezclan con elementos visuales de la cultura Argentina.
La entrada es un pequeño retrato de una de las calles más históricas en Buenos Aires, que mereció un tango que inmortalizó Carlos Gardel, 'Caminito'.
En uno de los salones las paredes se adornan con los artefactos que representan la vida del gaucho, el vaquero argentino.
Cuando se está en su interior es difícil dejar de observar la enorme parrilla que se encuentra a la entrada. Esta fue diseñada por el dueño, Juan Miguel Colín, y se parece a las cocinas de los ranchos argentinos.
La parrillada argentina es, obviamente, el plato fuerte del lugar. Trae una porción de bife, de pollo, de costilla y dos chorizos.
Se sirve en una miniparrilla que le llevan a la mesa.
La parrillada es acompañada de chimichurri y unas galletas triangulares de trigo con exquisito sabor casero.
Por su puesto el chimichurri no podía faltar. Este es servido con un ingrediente adicional, que da un leve sabor a picante y que sólo se sirve en este lugar.
Pero si a usted no le gusta el picante, también tienen el chimichurri tradicional.
El corte de la carne y su jugosidad le da un sabor especial difícil de describir.
De postre, el más rico es sin lugar a dudas los crepes de dulce de leche.
Una de las bebidas típicas o tradicionales que se sirve es el clericot, que no es más que una sangría blanca servida con trozos de fruta.
El vino no puede faltar en una comida argentina y mucho menos acompañando un buen bife.
Mejor que sea un Malbec, el vino famoso de la provincia de Mendoza, que tiene un buqué incomparable.
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